top of page

EDUCAR Y GESTAR EN CULTURA

Héctor Ariel Olmos


Hoy que Ricardo Santillán Güemes ya no está con nosotros, reproducimos en este volumen textos que consideramos de plena vigencia, y agregamos alguno nuevo como ligera actualización.


   Empezamos con 'Pilón' –como lo llamaba todo el que se acercaba a él–  nuestra aventura formadora hacia 1980. Nos reunió Hugo Caruso en la Universidad de Belgrano para organizar unas jornadas sobre culturas regionales, las que se convirtieron en un acontecimiento que superó nuestras expectativas. A partir de ahí, juntamos ideas, alternativas; y nos pareció clave formar a los docentes y gestores culturales en estas temáticas que los profesorados e instituciones afines soslayaban y que nosotros consideramos fundamentales para afianzar el sentido de pertenencia y el amor a lo propio (por aquello de que no se ama lo que no se conoce). Introducir un concepto operativo de cultura rompiendo las nociones restringidas, y por lo tanto elitistas, proponer estrategias para implementarlo, produjo en los participantes saludables movilizaciones que habrían de influir en sus experiencias de aula y de gestión.


   La propuesta de Educar y gestar en cultura gira alrededor de considerar que toda actividad humana nos remite indefectiblemente a un determinado contexto cultural: a un tiempo, a un espacio, a unas formas de comunicar y de organizar socialmente la supervivencia; y también a ciertas maneras de producir y reproducir un universo significativo. En ese contexto, la función principal de la educación desde que existe históricamente como institución ha sido formar culturalmente no sólo a niños y jóvenes, sino también a los restantes miembros de una sociedad.


   Se impone la necesidad de trabajar sobre estas premisas:


.1 Toda acción educativa es una construcción socio-histórica y, por lo tanto, en un sentido amplio: cultural. O, dicho de otra manera, la educación es siempre emergente de una cultura entendida ésta como una forma integral de vida.


2. La finalidad de todo proceso educativo es la formación humana integral y es éticamente imprescindible preguntarse: ¿Desde qué modelo de humanidad estamos operando en nuestra práctica profesional? ¿Es ese el modelo al cual aspiramos y en cuya construcción queremos colaborar? Y si no lo es ¿ ccómo construimos algún otro?


3. Todo proceso formativo (educativo) es “total”, y cualquier separación entre lo físico, emocional y mental debe ser operativa.


   No hay educación sin cultura; simplemente porque ésta es la matriz, el marco, el contenido y el fin de todo proceso de formación humana. Así todo docente es un gestor cultural y, en gran medida, todo gestor cultural educa con su hacer.


Posts Destacados 
bottom of page